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Los últimos cambios en la cotización a la Seguridad Social van a afectar de una forma u otra a los beneficios sociales que algunos empleados gozan dentro de sus empresas: es lo que llaman el nuevo golpe a la nónima: vales de comida, plus de transporte y otros beneficios sociales tributarán.

Los cambios consisten en gravar con cotizaciones los beneficios sociales otorgados como pluses y que hasta ahora estaban exentos (en algunos casos hasta un tope) de cotización, como los de transporte, la entrega de acciones de la empresa, los vales restaurante y los comedores subvencionados, las aportaciones a los planes de pensiones, los seguros médicos y de accidentes y los cheques guardería. Por ello, hemos querido pulsar la opinión de nuestros lectores y saber qué impresión tienen.

Tras contabilizar los casi 50.000 votos recibidos, el resultado es el siguiente: Casi un 65% de los votos recibidos piensan que los empresarios van a prescindir de ofrecer beneficios sociales a sus empleados.

Un 34% cree que el tiempo dirá si la nueva normativa hace que desaparezcan las empresas proveedoras de esos servicios.

Tan sólo un 2% piensa que la normativa no va a afectar a los empleados, "ajustarán gastos".

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