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El verano está cambiando las reglas del juego en el comercio electrónico nacional. Datos recientes muestran que el mercado online sigue creciendo, incluso bajo el sol del verano, lo que lleva a las empresas españolas a replantearse sus estrategias y su infraestructura logística. Packlink, la plataforma líder para comparar y reservar servicios de envío, destaca cómo la creciente movilidad y los hábitos de compra cambiantes de los consumidores en verano están transformando el panorama logístico.
Según datos de Randstad, se prevé un total de 698.340 contrataciones en los sectores de comercio, transporte, turismo, hostelería y entretenimiento. Esto supone un aumento del 9,4 % respecto al verano anterior. Además, de ese total, 300.300 empleos corresponden al sector logístico, que representa el 43 % del conjunto nacional. De tal forma que, el sector se consolida como uno de los principales motores del empleo estacional en España.
El aumento de las temperaturas supone retos operativos específicos para la logística del comercio electrónico. El clima cálido afecta directamente a la calidad del servicio, especialmente en categorías como la alimentación, los cosméticos y los productos farmacéuticos, donde el riesgo de deterioro o la necesidad de devoluciones aumenta considerablemente. Además, las ausencias por la temporada actual y los turnos durante las vacaciones pueden poner a prueba la capacidad de gestión, lo que requiere una planificación meticulosa. Al mismo tiempo, el comportamiento de los consumidores cambia: cada vez más móviles, los consumidores compran a través de sus smartphones y esperan opciones de entrega más rápidas y flexibles, lo que hace que los servicios de envío ágiles y receptivos sean esenciales.
Para afrontar con éxito la temporada de verano, las empresas con visión de futuro están aprovechando la oportunidad para implementar soluciones innovadoras y adoptar enfoques logísticos estratégicos, consolidando así su posición en el mercado.
Una de estas medidas es la inversión en almacenes inteligentes y entornos con control de temperatura, fundamental para conservar los productos más delicados en las mejores condiciones. Asimismo, la planificación proactiva de los recursos junto con alianzas estratégicas durante los meses de mayor actividad, ayudan a satisfacer los picos de mayor demanda. En paralelo, la incorporación de modelos de entrega flexibles, como los puntos de recogida o las entregas programadas, responde a las expectativas de los consumidores cada vez más exigentes y dinámicos.
Otra de las estrategias clave es la adopción de tecnologías IoT y análisis de datos, que facilitan la supervisión en tiempo real de las condiciones logísticas, optimizando así cada etapa del proceso logístico. A esto se suma el seguimiento avanzado de los envíos y la comunicación transparente con los clientes, a través de notificaciones y actualizaciones constantes, que mejoran notablemente la experiencia del cliente y reducen las tasas de devolución. Por último, el embalaje personalizado para el verano no sólo cumple con la función estética, sino que también crea una conexión emocional, fomenta la fidelidad del cliente y anima a repetir las compras.
El verano de 2025 estará marcado por varias macrotendencias clave que transformarán directamente la logística del comercio electrónico.
En primer lugar, el comercio móvil cobra protagonismo, ya que la mayoría de las compras de verano se realizan a través del smartphone, lo que exige sistemas de pedido y seguimiento plenamente optimizados para dispositivos móviles, que garanticen una experiencia fluida y sin fricciones.
A su vez, la personalización basada en la inteligencia artificial se está convirtiendo en un recurso estratégico fundamental, ya que ofrece recomendaciones relevantes gracias al comportamiento estacional y a la geolocalización para atraer a los consumidores, especialmente a los viajeros, en tiempo real.
Por otro lado, el auge del comercio social también redefine los canales de venta. Con plataformas como Instagram y TikTok, los usuarios pueden comprar sin salir de la aplicación, lo que exige operaciones logísticas ágiles, integradas y listas para responder a demanda inmediata.
A pesar de este cambio en los hábitos de consumo, los datos del mercado laboral en el sector logístico son positivos. Los últimos registros muestran que el paro en logística y transporte disminuyó un 3 % entre abril y mayo, mientras que la contratación aumentó significativamente durante ese periodo, especialmente para cubrir la campaña de verano.
Por último, el creciente interés por los productos locales y la sostenibilidad está reconfigurando las prioridades de los consumidores. En este contexto, las empresas que apuestan por una logística ecológica, promueven los productos regionales y se basan en cadenas de suministro cortas, están ganando relevancia y fidelidad.
"Ya no es momento de considerar el verano como una época de inactividad para el comercio electrónico. Nos enfrentamos a un momento de crecimiento dinámico que exige agilidad e innovación por parte de las empresas. En Packlink, nuestra misión es proporcionar las herramientas y el apoyo necesarios para gestionar cada envío de forma eficiente y fiable, convirtiendo los retos estacionales en verdaderas ventajas competitivas", afirma Noelia Lázaro, directora de marketing de Packlink.
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