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El pasado 2016 fue un año no excesivamente positivo en lo que a las empresas se refiere, si bien se espera que este año que comienza la situación continúe.

En una investigación encargada por Ricoh Europe se muestra que el 91% de los trabajadores estiman que tanto la incertidumbre económica, las turbulencias políticas y la disrupción digital obligarán a cambiar la forma de trabajo en un futuro cercano.

Los trabajadores europeos comparten una perspectiva positiva más amplia. El 59% opina que las empresas en las que trabajan estarán en una posición más firme a finales de año con respecto a su situación actual. Por su parte, el 66%, cree que los responsables de sus empresas están preparados para afrontar un panorama cambiante. De hecho, solo el 8% de los trabajadores no confía en su jefe y el resto no están seguros.

Según los trabajadores encuestados, la tecnología será el elemento que abra la puerta del éxito en el año venidero. Se espera que los efectos de la disrupción digital, así como las oportunidades y cambios provocados por la innovación competitiva ejerzan la mayor de las influencias, con una mayor automatización que ahorrará tiempo a los trabajadores para permitirles generar más valor.

Así las cosas, los trabajadores esperan que sus empresas sean más creativas, gasten menos recursos y adopten nuevas tecnologías. De hecho, al 61% le gustaría que sus empresas echasen mano de la tecnología para equilibrar estos cambios. Esto incluye mejorar la comunicación con los clientes, aumentar la productividad mediante tecnologías colaborativas y utilizar tecnologías digitales para simplificar los procesos empresariales.

Sin embargo, la investigación arroja una advertencia. En estos tiempos de cambio, las empresas deben procurar seguir siendo atractivas para los mejores talentos, ya que los trabajadores también buscan estabilidad en sus puestos. La estabilidad laboral, un respaldo financiero sólido y la oportunidad de trabajar para una gran empresa son los mayores atractivos para los demandantes de empleo.

David Mills, director ejecutivo de Ricoh Europe, ha declarado sobre este tema: "La forma de relacionarse, comprometerse y trabajar de las personas está cambiando radicalmente. En los años venideros veremos empresas situarse en dos campos diferenciados. En primer lugar, aquellas con fuertes procesos que capacitan a los trabajadores permitiéndoles hacer mejor su trabajo, adaptarse y prosperar. En segundo lugar, aquellas empresas que rehúyan el cambio y, por desgracia, harán fracasar a sus empleados".

"Mientras el mundo siente el impacto de cambios sin precedentes, los líderes empresariales se podrán preguntar en qué ámbito se beneficiará más la empresa que aporte más tecnología innovadora. Para permitir que sus empresas se mantengan centradas en sus objetivos a largo plazo y sigan siendo competitivas, a menudo el mejor lugar por donde empezar es por los trabajadores".

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