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Deere & Company, líder mundial de maquinaria, soluciones y tecnología para los profesionales del campo, ha anunciado un beneficio neto de 2.246 millones de dólares en el cuarto trimestre de su año fiscal, finalizado el pasado 30 de octubre (7,44 dólares por acción). Esto supone un incremento interanual del 75% en comparación con los 1.283 millones de dólares (4,12 dólares por acción) que registró el 31 de octubre de 2021. A cierre del año fiscal de 2022 el beneficio neto atribuible a Deere & Company ha sido de 7.131 millones de dólares, un 20% más en comparación con los 5.963 millones (18,99 dólares por acción) que la multinacional obtuvo en 2021.

Los ingresos por ventas a nivel mundial aumentaron un 37% durante el cuarto trimestre del año fiscal de la compañía, hasta los 15.536 millones de dólares, mientras que crecieron un 19% a lo largo de todo el ejercicio, hasta los 52.577 millones de dólares. Los ingresos por ventas de las Operaciones de Equipos fueron de 14.351 millones de dólares para el cuarto trimestre y de 47.917 millones para el año completo, frente a los 10.276 millones y los 39.737 millones de los mismos períodos del año pasado, respectivamente.

''Estos sólidos resultados tanto en el cuarto trimestre como en la totalidad del año fiscal han sido posibles gracias a la gran dedicación de nuestros empleados, distribuidores y proveedores en todo el mundo'', comenta John C. May, presidente y director general de la compañía, quien también afirma que ''estamos orgullosos del esfuerzo adicional que han hecho a lo largo de este año para sobreponerse a las dificultades en la cadena de suministro, aumentar nuestra capacidad productiva y hacer llegar nuestros productos a los clientes''.

Perspectiva de la compañía

La multinacional prevé que el beneficio neto atribuible a Deere & Company para el año fiscal 2023 esté entre los 8.000 y los 8.500 millones de dólares.

''En 2023 esperamos tener una fuerte actuación potenciada por un buen desempeño de los parámetros agrícolas y del dinamismo de nuestra flota, así como un incremento de nuestras inversiones en infraestructuras'', apunta May. ''Esperamos que estos factores repercutan en una buena demanda de nuestros productos. Igualmente, depositamos nuestra confianza en nuestro modelo operacional 'Smart Industrial' y nuestra habilidad para ofrecer a nuestros clientes soluciones que los ayuden a ser más rentables, productivos y sostenibles''.

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